Santo Domingo, 18 de diciembre de 2024
En medio del mayor decomiso de sustancias ilícitas registrado en República Dominicana, surgen interrogantes sobre la procedencia y logística detrás de las casi 10 toneladas de droga incautadas. Durante una entrevista en el programa Impolíticamente Correcto, el general retirado Orlando Rosado Mateo, exdirector de la DNCD, ofreció su perspectiva sobre el caso.
Un cargamento sin precedentes
El decomiso incluyó 9.8 toneladas de cocaína, lo que lo convierte en el cargamento más grande incautado en el país y posiblemente en el Caribe. Este hallazgo plantea serias dudas sobre la procedencia y las redes logísticas involucradas.
Según Rosado Mateo, “es importante comprender la magnitud de la cifra: un kilo equivale a 2.2 libras, y una tonelada, en este caso, corresponde a 2,200 libras. Esto nos da un aproximado de 21,560 libras de droga. Este volumen no puede movilizarse sin una estructura logística de gran escala”.
La narrativa oficial: un caso lleno de inconsistencias
El general señaló las contradicciones en los reportes oficiales. Según los comunicados iniciales, el cargamento habría salido de Guatemala en un contenedor de bananas, pero posteriormente las autoridades guatemaltecas negaron esta versión. Incluso el presidente de Guatemala descartó que el cargamento tuviera origen en su territorio o en Honduras.
En República Dominicana, las autoridades señalaron que el cargamento podría haber sido contaminado en un puerto. Sin embargo, Rosado Mateo destacó que uno de los contenedores relacionados llegó vacío desde China y luego fue cargado antes de su reingreso al puerto. Esto genera dudas sobre si la droga fue almacenada y movilizada localmente.
¿Dónde se almacenó la droga?
El general enfatizó que almacenar tal cantidad de droga requiere complicidad local:
- Logística: Una operación de este nivel implica identificar un lugar con suficiente discreción para albergar el cargamento sin ser detectado.
- Rutas: El tiempo entre la salida y regreso del contenedor sugiere que la droga estaba almacenada cerca del Gran Santo Domingo, posiblemente a no más de tres horas de distancia del puerto.
“Es imposible que un cargamento de esta magnitud no esté vinculado a un nombre dominicano, ya sea el dueño del almacén o alguien encargado de su movilización”, afirmó Rosado Mateo.
El impacto del narcotráfico en el país
El general advirtió sobre el riesgo de “mexicanización” o “colombianización” de República Dominicana debido a la presencia de cárteles internacionales y la posible complicidad de estructuras locales. También sugirió que la cantidad incautada podría desencadenar represalias violentas por parte de las organizaciones narcotraficantes.
Propuestas para combatir el narcotráfico
Rosado Mateo reiteró la necesidad de tribunales especializados para tratar casos de narcotráfico, con jueces y fiscales protegidos. Señaló que en zonas como Pedernales, donde recientemente se incautaron 732 kilos de droga, los funcionarios judiciales enfrentan amenazas que dificultan procesar estos casos.
El rol de los cárteles internacionales
El general planteó que las investigaciones deberían determinar si el cargamento está vinculado a los cárteles de Jalisco Nueva Generación o Sinaloa, considerando la competencia entre estas organizaciones. Según Rosado Mateo, la procedencia de la droga es clave para entender las dinámicas y actores involucrados.
Reflexiones finales
El general destacó que el combate al narcotráfico no solo debe enfocarse en las incautaciones, sino en desmantelar las estructuras logísticas y financieras detrás de estas operaciones. Subrayó la importancia de la transparencia y pidió a las autoridades dominicanas respuestas claras sobre el caso.
“El pueblo dominicano merece claridad. Es fundamental saber de dónde vino esa droga, quién permitió su entrada y qué medidas se están tomando para evitar que esto vuelva a ocurrir”, concluyó.